La ONU reconoce la EF, la AF y el deporte como ejes frente a las ENT y la salud mental
- Consejo COLEF
- 6 oct
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LA ONU RECONOCE LA EDUCACIĆN FĆSICA, LA ACTIVIDAD FĆSICA Y EL DEPORTE COMO EJES FRENTE A LAS ENFERMEDADES NO TRANSMISIBLES Y LA SALUD MENTAL
La Asamblea General de la ONU ha aprobado la Declaración PolĆtica sobre Enfermedades No Transmisibles y Salud Mental, que reconoce de forma explĆcita la inactividad fĆsica y los estilos de vida sedentarios como factores de riesgo modificables. El texto compromete a los Estados a promover la actividad fĆsica, aumentar los espacios pĆŗblicos activos, fomentar el deporte y la recreación, y reducir el sedentarismo. AdemĆ”s, incluye la obligación de Ā«promover la actividad fĆsica, incluida la educación fĆsica y el deporte, en programas escolares y comunitariosĀ»..
El 25 de septiembre de 2025, las Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno reunidos en la Asamblea General de Naciones UnidasĀ aprobaron la Declaración PolĆtica sobre Enfermedades No Transmisibles (ENT) y Salud Mental. Este documento constituye un hito internacional en la lucha contra la principal causa de muerte y discapacidad en el mundo, y marca la hoja de ruta global hacia 2030 en la prevención de las ENT y la promoción del bienestar psicológico.
LA INACTIVIDAD FĆSICA Y EL SEDENTARISMO, RIESGOS SEĆALADOS DE MANERA EXPLĆCITA
La Declaración establece de forma clara que los principales factores de riesgo modificables de las ENT son Ā«el consumo de tabaco, el consumo nocivo de alcohol, las dietas poco saludables, la inactividad fĆsicaĀ y la contaminación del aireĀ». El texto subraya que todos ellos Ā«son en gran medida prevenibles y requieren acciones intersectorialesĀ».
TambiĆ©n advierte que los procesos de urbanización estĆ”n generando Ā«estilos de vida sedentarios e inactividad fĆsicaĀ», lo que, junto a dietas inadecuadas, malnutrición y hambre, supone riesgos crecientes para la salud pĆŗblica. Frente a ello, los Estados se comprometen a movilizar y asignar recursos suficientes, previsibles y sostenidos que permitan desarrollar respuestas nacionales efectivas.
En el caso de la obesidad, la Declaración afirma literalmente que esta estĆ” impulsada por mĆŗltiples factores, Ā«incluyendo la falta de actividad fĆsica, la falta de sueƱo y el estrĆ©sĀ».
COMPROMISOS PARA CREAR ENTORNOS ACTIVOS Y ACCESIBLES
La Declaración no se limita a seƱalar los problemas, sino que fija compromisos concretos. Entre ellos, se incluye el llamamiento a Ā«promover la actividad fĆsica aumentando el nĆŗmero de espacios pĆŗblicos en los que las personas, a lo largo de todo el curso vital, puedan estar fĆsicamente activasĀ».
Asimismo, en las medidas de promoción de hĆ”bitos de vida saludables, los Estados acuerdan Ā«promover una actividad fĆsica adecuada, incluidos el deporte y la recreación, y reducir el comportamiento sedentario, incluso aumentando el acceso a los espacios pĆŗblicosĀ».
Estos compromisos colocan a la actividad fĆsica en el centro de las polĆticas urbanas, de movilidad y de ordenación de los espacios pĆŗblicos, reconociendo que las ciudades y comunidades deben configurarse para facilitar que todas las personas tengan oportunidades reales de moverse y estar activas.
EDUCACIĆN FĆSICA Y DEPORTE EN PROGRAMAS ESCOLARES Y COMUNITARIOS
La Declaración va mĆ”s allĆ” al mencionar expresamente la necesidad de actuar en el Ć”mbito educativo. Dentro de las acciones dirigidas a mejorar la alfabetización en salud, se establece el compromiso de Ā«promover la actividad fĆsica, incluida la educación fĆsica y el deporte, y reducir el tiempo de pantalla de los niƱos y niƱas, con vĆnculos a programas escolares y comunitariosĀ».
Este punto supone un reconocimiento sin precedentes a la educación fĆsica como herramienta de salud pĆŗblica, integrĆ”ndola de forma explĆcita junto con el deporte y la actividad fĆsica en las estrategias globales para reducir la inactividad y el sedentarismo desde edades tempranas. AdemĆ”s, resalta la importancia de conectar la acción escolar con programas comunitarios, ampliando el impacto educativo al entorno social.
IMPLICACIONES PARA ESPAĆA Y PARA LA PROFESIĆN
Para EspaƱa, el documento de Naciones Unidas aporta un aval internacional a la necesidad de garantizar que la población tenga acceso a espacios adecuados, a programas de deporte y recreación, y a una educación fĆsica de calidad.
Para la profesión de las educadoras y educadores fĆsico deportivos, la Declaración constituye un respaldo polĆtico y simbólico de mĆ”ximo nivel. Reconoce que la educación fĆsica, la actividad fĆsica y el deporte son piezas esenciales en la prevención de las enfermedades no transmisibles y en la promoción del bienestar mental, y que reducir la inactividad fĆsica y el sedentarismo es una prioridad global.
En definitiva, la ONU ha dejado claro que la lucha contra las ENT y los problemas de salud mental no puede entenderse sin incorporar la actividad fĆsica en todas sus dimensiones. Este respaldo internacional es una oportunidad para seguir avanzando en EspaƱa en la implementación de polĆticas que den cumplimiento efectivo a estos compromisos, situando a la profesión de las educadoras y educadores fĆsico deportivos en el centro de las estrategias de salud pĆŗblica.
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