āQueda por delante el firme compromiso de los/as profesionales, en el caso de los/as educadores/as f
- Consejo COLEF
- 28 jun 2019
- 6 Min. de lectura

DĆA DEL ORGULLO LGTBI+:
EN LA EDUCACIĆN FĆSICA Y EL DEPORTE TODAVĆA QUEDA CAMINO POR RECORRER
ArtĆculo de opinión, por la Dra. DƱa. Carlota DĆez Rico, col. 52.838, Coordinadora Intercolegial del Consejo COLEF.
El pasado aƱo, con motivo del DĆa Internacional del Orgullo LGTBI+, el Consejo COLEF publicó el āManifiesto por un deporte mĆ”s inclusivo con los colectivos LGTBI+ā, en conjunto con la Agrupación Deportiva IbĆ©rica LGTB. Este documento seƱalaba 9 puntos necesarios para que el sector de la Educación FĆsica y el Deporte sea un lugar seguro para la diversidad de identidades y expresiones de gĆ©nero y orientaciones sexuales, partiendo del compromiso de todas las personas profesionales.
Este aƱo, en los dĆas previos a esta fecha tan seƱalada, el Consejo COLEF ha vuelto a recordar este Manifiesto que sigue siendo inclusive mĆ”s necesario cuando los derechos fundamentales de las personas pertenecientes a estos colectivos estĆ”n siendo vulnerados de forma flagrante tambiĆ©n en EspaƱa, el que se supone como uno de los paĆses en el que las personas LGTBI+ estĆ”n mĆ”s āaceptadasā. Las cifras de los delitos de odio y las noticias sobre agresiones estĆ”n ahĆ para toparnos de bruces con la realidad.
BREVE RESEĆA HISTĆRICA
Antes de reflexionar sobre los colectivos LGTBI+ en el deporte, es necesario hacer una breve nota para aquellos que desconozcan por quĆ© se celebra el DĆa Internacional del Orgullo LGTBI+. Hace hoy exactamente 50 aƱos, el 28 de junio de 1969, de los ādisturbios de Stonewallā, una serie de manifestaciones espontĆ”neas en protesta contra una redada policial que se habĆa producido la madrugada de ese dĆa, como era habitual, en el pub Stonewall Inn, el Ćŗnico bar para personas transexuales, travestis y transgĆ©nero de la ciudad de Nueva York en aquel momento. Un aƱo despuĆ©s, esta protesta contra la represión y pidiendo un trato digno como seres humanos, se conmemoró con la primera marcha del Orgullo.
ĀæPor quĆ© āorgulloā? No se trata de estar orgullosos de la identidad o expresión de gĆ©nero o de la orientación sexual, sino de la valentĆa para ser visibles y solicitar tener los mismos derechos que el resto de colectivos, para luchar por que pertenecer a los colectivos LGTBI+ no se considere un delito (segĆŗn datos de AmnistĆa Internacional, tener relaciones sexuales con una persona del mismo sexo actualmente es ilegal en 70 paĆses, en algunos pueden condenarte con cadena perpetua, y en 9 de ellos con pena de muerte) o un condición por la que poder ser discriminado.
TrasladĆ”ndonos a EspaƱa, cuando se celebró aquella primera marcha en Nueva York, la Ley 16/1970, de 4 de agosto, sobre Peligrosidad y Rehabilitación Social decĆa que āserĆ”n declarados en estado peligroso, y se les aplicarĆ”n las correspondientes medidas de seguridad y rehabilitación [...] los que realicen actos de homosexualidadā. Hasta 1978 este precepto no desapareció, aunque hasta 1981 las personas trans siguieron yendo a la cĆ”rcel por realizarse cirugĆa genital. En 2005 en EspaƱa se produjo un gran avance, la aprobación del matrimonio igualitario, que no solo supuso un paso legal, sino que en mĆ”s de una dĆ©cada se ha configurado como una medida bĆ”sica para la visibilidad de los colectivos LGTBI+.
LOS COLECTIVOS LGTBI+ EN LA EDUCACIĆN FĆSICA Y EL DEPORTE
Ahora bien, en la Educación FĆsica y el Deporte todavĆa queda camino por recorrer, y de hecho existe tanta conciencia a nivel mundial al respecto de este Ć”mbito que el 19 de febrero de cada aƱo se celebra el DĆa Internacional contra la LGTBI+fobia en el Deporte.
Los titulares relacionados con el deporte muestran una sociedad que todavĆa discrimina a gais, lesbianas, transexuales, bisexuales, etc. y emplea esta realidad como motivo de insulto:
āShakira tiene rabo y tĆŗ eres maricónā: el cĆ”ntico contra Pique en Cornella que denuncia de la Liga, vĆa El EspaƱol, publicado el 19/01/2018.
Denuncian a un jugador del Sevilla por insultos homófobos al Ć”rbitro, vĆa El Heraldo de Aragón, publicado el 25/05/2016.
Por otra parte uno de los datos mÔs destacados por las Asociaciones LGTBI+ es que en La Liga de fútbol profesional no hay ningún jugador que haya declarado públicamente una orientación sexual diferente a la heteronormativa. Existe escasa visibilidad LGTBI+ en el Ômbito federativo, especialmente en los deportes que mÔs espectadores reúnen. Espectadores, deportistas, profesionales y técnicos generan un ambiente hostil, provocando situaciones como esta:
āNo veĆa bien ser buen deportista y ser gayā, vĆa El PaĆs, publicado el 29/10/2019.
No se trata solo de la violencia ejercida hacia los colectivos LGTBI+, sino tambiĆ©n de asociar el deporte a determinadas expresiones de gĆ©nero, provocando asĆ barreras psicosociales hacia la prĆ”ctica fĆsico-deportiva de determinados colectivos, en este caso de las mujeres.
"La llamaban marimacho porque le gusta jugar a fĆŗtbol, le decĆan que las niƱas eran inferiores a los niƱos", vĆa El Mundo, publicado el 11/10/2016.
āĀæSoy marimacho por jugar al rugby?ā Estas jugadoras tienen la respuesta, vĆa PlayGround, publicado el 06/07/2017.
El error de asociar deporte y masculinidad mediatiza las creencias de niƱos y adolescentes con respecto a la prĆ”ctica deportiva y pone en peligro los aprendizajes humanĆsticos del deporte base y escolar. Las expresiones de gĆ©nero, los roles asumidos por la sociedad para un gĆ©nero u otro, no deben tener cabida en relación a la Educación FĆsica y el Deporte. No pueden seguir leyĆ©ndose noticias con titulares como este:
Entrenamientos militares para convertir a los niƱos chinos āen hombresā, vĆa La Vanguardia, publicado el 13/11/2018.
Pero la violencia también puede ejercerse desde la instituciones y la forma que tienen de articular sus normas. En el Ômbito del deporte competición la regla de la testosterona no se adecua a la conceptualización de identidad de género, y de cualquier manera establece una forma binaria de clasificación.
Atletas transexuales en competiciones deportivas: la controversia, vĆa Infowod, publicado el 16/01/2018.
En los Ômbitos del deporte con otros fines diferentes al competitivo (salud, recreación, educación, etc.) instalaciones y profesionales no contemplan las necesidades de las personas transexuales e intersexuales, por ejemplo en cuanto al uso de vestuarios, y especialmente en los procesos de transición de transexualidad.
Bizkaia empiezan a regular que las personas transexuales elijan el baƱo que les corresponde, vĆa Deia, publicado el 10/09/2017.
En relación a la enseƱanza de la Educación FĆsica el 64,5% del alumnado de Secundaria en las clases de Educación FĆsica ha sido testigo de comportamientos homofóbicos entre estudiantes y un 33% los ha sufrido en primera persona en alguna ocasión, incluso siendo heterosexuales (Piedra de la Cuadra, RodrĆguez SĆ”nchez, Ries y RamĆrez MacĆas, 2013).
¿CuÔl es la solución a todo este problema social e institucional?
En el deporte hace aƱos se crearon asociaciones, clubes, federaciones, ligas, etc. para personas de los colectivos LGTBI+ como medida para generar espacios seguros para la prĆ”ctica deportiva. Como ejemplo de ello podemos nombrar a nivel internacional la Federation of Gay Games o la International Gay and Lesbian Football Association, aunque EspaƱa tambiĆ©n hay diversos ejemplos. Si bien es cierto que estas entidades han realizado y estĆ”n realizando una importante labor en lugares donde la āaceptaciónā a los colectivos LGTBI+ es muy baja, el Dictamen del ComitĆ© de las Regiones sobre el tema Ā«Igualdad de oportunidades y deporteĀ» (2007) considera que āocultar y segregar no puede ser una solución a largo plazo: el objetivo ha de ser que todos los hombres y todas las mujeres puedan acudir a todos los clubes deportivos, con independencia de su orientación sexualā.
Por otra parte, se debe considerar la hipótesis de que muchas mujeres lesbianas han encontrado como factor motivacional para la prĆ”ctica deportiva, especialmente en deportes de equipo, la posibilidad de vivir su orientación sexual de forma libre dentro de un grupo. PodrĆamos reflexionar si una de las razones se debe a la asociación del deporte con las masculinidades y, por tanto, la adhesión de las mujeres lesbianas que utilizaban roles y expresiones de gĆ©nero de lo que se consideraba propio de los hombres asumiĆ©ndolo como parte de su identidad lĆ©sbica. El deporte como reclamo para encontrar un lugar seguro donde mostrar la orientación sexual de forma segura es posible que haya jugado su función social con las lesbianas.
La legislación tambiĆ©n intenta poner freno a las situaciones de violencia y discriminación. A nivel estatal, en el Ć”mbito del deporte, la Ley 19/2007, de 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte integra la intolerancia como el ācajón de sastreā para una gran variedad de realidad que sufren discriminación, independientemente si los delitos de odio por ello son mayoritarios o no en el deporte. En cuanto a los colectivos LGTBI+, solo contempla de forma especĆfica la discriminación por orientación sexual.
A nivel autonómico, de las 17 leyes del deporte, solo 5 hacen referencia directa a alguno de los colectivos LGTBI+. También algunas leyes de regulación del ejercicio profesional en el deporte contemplan como derecho de los consumidores, usuarios y deportistas la igualdad de trato independientemente de la identidad de género o la orientación sexual.
El deporte, al ser un concepto transversal, tambiĆ©n se aborda en varias de las leyes especĆficas sobre los colectivos LGTBI+ de las diferentes Comunidades Autónomas. En todas en las que se menciona el deporte se habla de la promoción e inclusión de los colectivos LGTBI+, abordando la no discriminación y la lucha contra la LGTBI+fobia. En algunas se habla de la formación adecuada de los profesionales y tĆ©cnicos para poder abordar cualquier situación de discriminación de estos colectivos. Las mĆ”s avanzadas contemplan cuestiones relacionadas con el acceso a competiciones deportivas en relación a la identidad de gĆ©nero, e incluso la necesaria adaptación de aseos y vestuarios.
Ahora bien, lo que queda por delante es el firme compromiso de los/as profesionales, en el caso de los/as educadores/as fĆsico deportivos/as cumpliendo la deontologĆa de la profesión, para conseguir la plena inclusión de los colectivos LGTBI+.
